Llevo exactamente 3 horas y 21 minutos
buscando tu nombre en los archivos
revisando cada gesto, cada mueca, cada movimiento de cadera
cada mirada...
Pensando en cada pelo rubio
que se enredó en una de tus comisuras.
En cada pixel azul de tus ojos edulcorados
y en cada palabra de ese libro
del cual no recuerdo nombre ni autor.
En aquella manzana perfilada
en un ordenador gris metalizado
Que conseguía un perfecto efecto espejo
después de mi caluroso otoño y tu triste verano.
Dejemos que el tiempo sople a favor,
y rodemos por carreteras sin asfaltar.
Termina todos tus trabajos, y tus exámenes,
y tus días de cafés y cigarrillos.
Pero vuelve a pasar cada día,
por delante de mis ojos y sonríe como cada tarde
al caminar por el campus,
con cara de chica nueva
perdida en la universidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario